07 junio 2008

Alma de mi alma (del padre josé Kentenich)

Espíritu Santo, eres el alma de mi alma, te adoro humildemente.
Ilumíname, fortifícame, guíame, consuélame.
Y en cuanto corresponde al plan eterno Padre Dios, revélame tus deseos.

Dame a conocer lo que el Amor eterno desea en mí.

Dame a conocer lo que debo realizar.
Dame a conocer lo que debo sufrir.
Dame a conocer lo que con silenciosa modestia y en oración, debo aceptar, cargar y soportar.

Sí, Espíritu Santo, dame a conocer tu voluntad y la voluntad del Padre, pues toda mi vida no quiere ser otra cosa que un continuado y perpetuo sí a los deseos y al querer del eterno Padre Dios.

No hay comentarios.: